Así que me
ha dicho mi chico que la cosa está tan mal que seremos "Bonnie and Clide" y
atracaremos un banco...no sé que haremos con el dinero, quizá compremos un colchón
lo instalemos en plena Plaza Mayor y nos pongamos allí a hacer lo que mejor
sabemos, jodernos. Quizá también nos dé un poco de tiempo de querernos matar el
uno al otro, aunque ¿por qué suicidarte, cuando puedes enamorarte?
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martes, 29 de enero de 2013
lunes, 28 de enero de 2013
Eso es lo que nos hace chicas.
Despejare
la cama esta noche por si te dignas a venir, a aparecer aunque sea solo para
hablar. Hace mucho que no te saco de quicio, que no me paseas por delante de
todas esas perras y la verdad es que hoy me apetece que me llames, que me
hables de tus exs, ver como te metes mierda por la nariz, fumarnos un porro,
echar un polvo…Y de todas esas entrepiernas con patas, quiero tu manera de no
estar conmigo y aún así llamarme y proponerme irnos muy lejos como sabiendo lo
que pienso, como adivinándolo. Y que aunque me lo piense, te responda que sí,
que quiero, que me llames, que me cojas, que me lleves, que te quiero, que me
arriesgo, que te elijo y que es mutuo.
domingo, 20 de enero de 2013
Siempre hemos hablado de puertas abiertas, pero nadie habla de ventanas encendidas.
La noche cayó como cemento mientras nosotros seguíamos
intentando fingir que tú no me odiabas, que yo no quería pegarte un puñetazo en
la cara y de repente, el comedor se inundó con mis gritos coléricos en silencio
entre tus preguntas retóricas. Retumbó el eco de mis tristes dudas y el portazo
que diste después de darme tu adiós, pero yo cogí mi mala cara y me fui, sin
cambiar de opinión hasta que llegué a aquel autobús y vi tu cara y mi cara
reflejada en el cristal como llamándome. Mire para otro lado sin dejar de
pensarte, ni de sentir que quería dar la vuelta, aún sin saber que decirte
exactamente y que esta vez no te cabrearás, pero yo tenía ese don de ponerte a
cien o de los nervios y no había término medio. No, nosotros no éramos de
medias tintas, si follábamos, follábamos, si discutíamos, terminábamos follando
y si nos decíamos adiós… Nunca nos habíamos dicho adiós.
sábado, 19 de enero de 2013
Pero no le llamarás, ni tampoco borrarás su número.
Cuando el maquillaje se va, quedas tú y tu lucha. Nada que
te tape y nada que te cubra y entonces las lágrimas amenazan con hacerte tocar
fondo y dejarte sin respiración, pero, hay esta él. Y aunque no sonríe sabes
perfectamente por que ha venido y buscando a quien. Su preocupación va a luchar
con su orgullo, con sus ganas de acercarte y tocarte y todos sabemos ya quién
ganará. Acostumbrada ya a estar sola harás como que no te importa, le quitarás
el polvo a los tacones que te regaló y saldrás queriendo que te echen unos
cuantos esta noche mientras intentas no pensar en cuando erais felices aunque
las cosas siempre fueran mal y nada más entrar al garito ya habrá cinco que te
sonrían como él. Probarás suerte con todos y la tendrás, al menos antes de
tirarles el cubata por la cabeza y escupirles en la cara sabiendo que no son
él, pero importándote una mierda. Y eso atraerá a otros 20 chulos gilipollas
con ganas de follarse a la chica borde de labios rojos cuya cara y andares son
todo un poema al irse por la puerta. Te quitarás los tacones y será como volver
a la realidad, que da miedo, que asusta, desde que ya no es él quien te sujeta
los tacones de vuelta a casa, pero no le llamarás…
lunes, 14 de enero de 2013
Somos almas afligidas y...
...todo lo que buscamos son unos brazos que nos quieran, que no vayan a irse mañana con las primeras luces . Tú nunca entendiste nada y tampoco es algo que pueda explicarsele a un desconocido con el que se folla, así que me diste dos dolares, un par de besos y te fuiste, o quizá fui yo, el caso es que de repente me vi fuera y sin saber volver. A veces tube alucinaciones en las que aún estábamos juntos, pero eso solo duró un par de meses, luego tube que buscarte en otros cuerpos y en otras bocas que eran del todo erróneas y crueles. Y aunque no lo merecía detrás de cada uno de ellos estabas tú, mirándome sin saber que decir, ni que sentías, pero eso también, como todas mis cosas, solo duro un par de meses. Todo aquel tiempo me atravesó, me destrozo y nadie se preocupo de si estaba bien o de si respiraba, solo me quitaban la ropa y me decían que yo era la mejor, cuando era del todo mentira, pero creí en ellos o al menos no hice como que no y me equivoque más de un par de meses y más de tres...Entonces un día me desperté con ganas de guerra y no te llame y me di cuenta de que mi corazón estaba más vacío de lo que acostumbraba cuando hablaba de ti y de todas esas veces que amenace con no volverte a ver y mentí. Me planté un sábado desesperada y colérica rogándote amor porque "estaba cansada de estar jodidamente loca y que no fuera por ti..."
martes, 8 de enero de 2013
Dime cuantas bocas has cosido desde que me fui.
Éramos tristes porque los buenos momentos nunca me inspiraron
a decirte cosas bonitas, me alejaban. No era capaz de corresponder a tus “te
quiero” con nada más que un beso y aunque sabía que nunca fue suficiente no lo corregí,
solo espere. Y tú me esperaste a mí, sentado en aquel coche rojo, cada vez más
nervioso, diciéndome que “nada” cuando estabas cabreado, pero me cansabas y te
chillé. Entramos en un bucle de querernos poco, de llamarnos lo mínimo y de no
decirnos más que hola, follar y adiós. A mí no me gusto, te preferiría a las
cinco de la mañana despertándome con tonterías como “déjame enamorarme de ti
por favor…”, pero ya hasta aquellas palabras no parecían tuyas cuando unos meses
después volví a leerlas y las borré. Eran demasiadas cosas, demasiadas pocas
ganas…así que a las 10 de un día 29 de Mayo estaba de vuelta, demasiado pronto
en casa, de donde nadie me pediría que volviera, ni me echaría de menos.
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